¡Hoy comemos en la piscina!

En verano y con estas olas de calor que nos azotan lo mejor es pasar el día en la piscina o si podemos, en la playa. Bañito por la mañana, comer y descansar refrescándose ligeramente durante la digestión y ¡a remojo toda la tarde!

Pero ¿Qué podemos llevar para comer? Después de unos días se nos agotan las ideas y descuidamos nuestra alimentación precisamente cuando más equilibrada debe ser. Por esta razón, hemos querido recopilar en este artículo platos y productos ideales para la piscina o la playa.

Lo primero a tener en cuenta es que con este calor las comidas deben ser ligeras, frescas y muy nutritivas, no deben llevar ningún ingrediente sensible al calor como la mayonesa y hay que mantenerlas frescas en neveras portátiles con hielo y a la sombra todo el tiempo. También conviene incluir muchos líquidos, preferentemente agua y zumos, además de fruta fresca.

Las ensaladas siempre serán nuestras aliadas. Las podemos hacer de pasta, arroz, legumbre y patata para que sean variadas y bien completas nutricionalmente, añadiendo hortalizas, encurtidos, lechuga diversas o endivias. También jamón de pavo, tiras de pollo a la plancha, sardinas o atún . El aliño mejor con aceite de oliva o alguna vinagreta que añadiremos en el momento de servir.

Por supuesto, la clásica tortilla de patatas, pero también de calabacín, atún, berenjena, champiñones, bacalao...

Los Bocadillos o sándwich  nos aportarán energía y podemos rellenarlo con vegetales (lechuga, tomate, pepino, etc.), jamón york y queso, bacalao al ajoarriero o calamares, por ejemplo. Eventualmente, embutidos o jamón.

Fritada de patata, calabacín, pimiento y cebolla. Bien fresquita es deliciosa. Añade unos huevos fritos o atún para completarla.

Empanadas caseras rellenas de boloñesa ligera (más tomate y vegetales que carne), de bacalao o sardinas con tomate, de beicon y queso, o de pisto (pimento verde y rojo, cebolla y tomate).

Pizzas caseras con ingredientes que sean apetitosos en frío como tomate, atún, alcaparras, olivas…

Gazpacho y filetes empanados (de pollo o pescado blanco).

Para el postre y la merienda siempre deberemos llevar fruta fresca que no esté demasiado madura. En verano hay un montón de variedades bien refrescantes. Si somos varios podemos llevar medio melón o media sandía. Si preferimos piezas individuales optaremos por llevar pavías, melocotones, albaricoques, cerezas, paraguayos, kivis, etc. Son fáciles de tomar en cualquier parte y nos aportarán las vitaminas y el agua que nuestro cuerpo necesita en días calurosos.

Con todas estas ideas podemos comer en la piscina o playa todos los días sin descuidar nuestra alimentación. Ahora sólo falta coger la crema solar, el bañador, la toalla y las ganas de divertirse. ¡Feliz Verano!